Clase nº 10
"Introducción a la lógica" de I.M.Copi
Clase nº 10: "Introducción a la lógica" de I.M.Copi.
"Tengo un amigo artista que suele adoptar una postura con la que yo no estoy muy de acuerdo. El sostiene una flor y dice: "Mira que bonita es", y en eso coincidimos. Pero sigue diciendo: "Ves, yo, como artista, puedo ver lo bello que es esto, pero tú, como científico, lo desmontas todo y lo conviertes en algo anodino". Y entonces pienso que él está diciendo tonterías. Para empezar, la belleza que él ve también es accesible para mí y para otras personas, creo yo. Quizá yo no tenga su refinamiento estético, pero puedo apreciar la belleza de una flor. Pero al mismo tiempo, yo veo mucha más en la flor que lo que ve él. Puedo imaginar las células que hay en ella, las complicadas acciones que tienen lugar en su interior y que también tienen su belleza. Lo que quiero decir es que no sólo hay belleza en esta escala de un centímetro; hay tambien belleza en una escala más pequeña, en la estructgura interna."
Richard P. Feynman(1999), pag.15
"Recuerdo a este propósito que a Roberto Arlt le echaron en cara su desconocimiento del lunfardo y que replicó: "Me he criado en Villa Luro, entre gente pobre y malevos, y realmente no he tenido tiempo de estudiar esas cosas".
J.L.Borges (en el prólogo a "El informe de Brodie")
II.4. "Palabras Emotivas" (pags. 64 a 67)
Las palabras y las frases tienen un significado literal, puramente cognoscitivo y un impacto emotivo. A este último se lo llama, por analogía "significado emotivo". Es una metáfora ya que en realidad no estamos pensando en "significados" sino en una respuesta de nuestro organismo a una palabra (frase o discurso); pero el uso la ha generalizado y con este significado ("impacto emocional") la usaremos.
"No hay palabras 'inocentes'".
Fijaos en esta frase. Si la analizara un marciano (o un robot inteligente) tendría dificultades para entender su sentido. La "inocencia" se refiere a un marco legal y al haber cometido una acción punible dentro de éste; pero las palabras no suelen cometer delitos, no son personas... entonces ¿como entenderlo?
Para nosotros el significado es cristalino (por lo menos eso creo). Quiere decir, en una forma retórica, que todas las palabras provocan emociones... o que todas las palabras (o frases, o en general el lenguaje supuestamente neutro) defienden intereses.
El significado preciso se aclarará en el contexto, en la situación comunicativa. Si hablamos de "palabras emotivas", elegiremos el primer significado (de los dos posibles; habría más pero para simplificar lo dejamos en dos).Si fuera un libro de sociología, sobre todo de "sociología marxista", casi seguro que eligiríamos el segundo significado. Tenemos el conocimiento previo sobre que las emociones ocupan un lugar secundario en la teoría (marxista), y que los "intereses" (en un sentido "de clase"), en cambio, figuran en una primera fila del análisis.
No es lo mismo decir "burócrata" que "empleado del Estado" o "servidor público". Cada palabra tienen sus significados (no siempre coincidentes) pero tambien tiene un impacto emocional muy diferente; que es lo que aquí, hoy, nos interesa.
Dice Copi:
"Podría pensarse que el impacto emotivo de una palabra o frase siempre se relaciona con las propiedades que posee aquello a lo cual se refiere esa palabra o frase. Según las palabras del poeta: "No cambiaría la rosa su perfume porque le diéramos otro nombre". Es cierto que la fragancia real de la rosa seguiría siendo la misma, cualquiera que fuera el nombre que queramos asignarle. Pero es muy probable que nuestra actitud hacia ella cambiaría si comenzáramos a llamar a las rosas, por ejemplo, "malezas fétidas". Los cambios en el otro sentido son familiares: los proveedores de conserva de caballa venden una cantidad mucho mayor de su producto ahora que lo llaman "atún"".
En esta perspectiva el lenguaje adquiere una vida autónoma, capaz de lograr la proeza de modificar el mundo, imponiéndole sus categorías y expresiones. El lenguaje se hace mágico; en el sentido más auténtico de la magia: provocar modificaciones en el mundo pronunciando las palabras adecuadas en la forma prescripta. El lenguaje y el ritual se complementan para dar el poder que niega el trabajo o el puro conocimiento.
Pero esos cambios sólo son "reales" en nuestra mente, lo que no quita que terminen siendo reales en el medio externo gracias a la acción humana. Fijaos como los límites se difuminan (entre lo mental y lo real) y aquello que es "sólo una ilusión" termina convirtiéndose en hechos "puros y duros". Al igual que esos rumores de quiebra pueden afectar seriamente a un Banco, de la misma manera la manera de percibir nuestro mundo puede terminar en la profecía que se autocumple.
A lo mejor algunos cambios que propugnamos podrían ser realidad... con la operación mágica de cambiarles de nombre. Copi cita al siguiente autor:
" Sugerir que la única manera de efectuar alguna reforma sería mediante un movimiento subversivo de los humanistas no es totalmente una humorada. En lo que sería un acto de justicia poética con los vocacionalistas, humanistas disfrazados podrían apropiarse de su terminología y contrabandear la educación humanística en el plan de estudios pretendiendo especializarlo aún más ¿Quién osaría oponerse a las humanidades, si se las presentara como "Influencia mercantil en el Renacimiento", "Pautas de mercado en la Inglaterra preindustrial" o "Técnicas de comunicación en el drama isabelino"?
(en William H. Whyte jr. "El hombre organización")
En un mismo idioma dependiendo de la zona se pueden usar unas palabras y en otra no. El usarlas traería alguna forma de "castigo" social, aunque leve. Quien escribe estas líneas ha podido apreciarlo en su experiencia directa. Pongamos por caso una palabra muy castellana: "culo". Dicha parte de nuestra anatomía (por demás indispensable, y quizá más usada que el cerebro) es practicamente tabú en la Argentina; se la reemplaza por varias similares pero no tan directas, por ejemplo "cola" (que todo el mundo asocia, y con razón, con las aves). Sin embargo en España dicha palabra no suena mal, y en cambio emplear un eufemismo como el señalado representaría una grado avanzado de cursilería. Todos podemos dar ejemplos similares sin necesidad de recorrer miles de kilometros.
Bertrand Russell (ya conocido en nuestro cursillo) hizo una muy inteligente broma contrastando el significado literal y el emotivo al convertir un verbo normal en irregular conjugándolo de una manera humorística:
"Yo soy firme;
tú eres obstinado;
él es un tonto cabeza dura."
Los ingleses, encantados con esta broma, por medio del diario londinense New Statesman and Nation abrieron un concurso de conjugaciones irregulares, entre las que Copi destaca las siguientes:
"Yo estoy justamente indignado;
tú estás fastidiado;
él está haciendo un escándalo por una tontería."
"Yo soy exigente;
tú eres melindroso;
él es una vieja maniática."
"Yo lo he reconsiderado;
tú has cambiado de opinión;
él ha retirado su palabra."
El humor puede ser visto, también como una clase de "significado emotivo". Probablemente la más elevada, algo que, por ahora, no compartimos con ningun otro ser del universo (conocido).
Nota: hace poco leí en el diario, a raíz del embrollo estadounidense de las últimas elecciones que un locutor de televisión yanki decía lo siguiente (cito de memoria):
"La situación actual es la siguiente:
Bush, no es presidente.
Al Gore, tampoco es presidente...
¿Por qué no lo dejamos así?
II. Ampliación.
El propósito de un pastel de fresas es contener fresas. El resto del pastel sólo está para permitir que las fresas se encuentren a razonable distancia unas de otras. El pastel actúa como una especie de matriz natural en la cual están suspendidas las fresas... (107)
Las palabras-dulces son como las fresas en el pastel. No existen dudas sobre la bondad de tales términos. Su valor es intrínseco y aceptado por todos...
...la respuesta a tales palabras es emocional...Como el pastel sirve para reunir las fresas, tambien encontramos largas argumentaciones llenas de lógica y de datos que sólo sirven como recurso para pasar en forma aceptable de una palabra-dulce a otra, con el objeto de provocar una reacción emocional de conjunto.
Entre las palabras-dulce...:
dignidad
honestidad
coraje
justicia
tradición
entereza
terminante
flexible
responsable
El valor de la argumentación reposa directamente sobre el valor establecido de tales términos... Así como el pastel tiene gusto porque las fresas saben bien, también sentimos que la argumentación es correcta debido a que se han introducido en forma apropiada suficientes términos-dulces...
[si, como experimento, invertimos el valor de esos términos-dulces] repentinamente la idea deja de parecer correcta por más que sigan allí la lógica y los datos (108).
...existen otras [palabras] que saben tan mal como un grano de sal en un pastel:
débil
degenerado
vacilante
astuto
deshonesto
oportunista
taimado
agresivo
Es absolutamente lícito utilizar términos que actúen como llaves emocionales capaces de abrir las compuertas de las emociones que nos hacen falta...
Podríamos decir que el objetivo único de todo desarrollo intelectual es llegar a un punto en el que reaccionemos de una manera determinada, positiva o negativa. (109)
Los sentimientos surgidos de las entrañas son como la energía encerrada en el arma, pero la dirección hacia el blanco se controla con la mente.
La exactitud emocional es un medio absolutamente válido... En la práctica...es el mecanismo más usado para mostrar que se está en lo cierto. Pero sufre de graves limitaciones.
Su escala de tiempo es de las más cortas. Si empleamos la certeza emocional para juzgar lo que es correcto o no, será difícil penetrar a traves de algo desagradable para percibir lo que hay de agradable más allá... Esta escala de tiempo tan corta es una limitación muy grave, puesto que uno de los objetivos fundamentales del pensamiento es liberarnos de la sujección a las reacciones inmediatas para mirar hacia adelante, hacia lo que sucederá más tarde. (110)
Otra limitación ... es que las ideas que apoya pueden oponerse a los intereses de los demás. Puesto que todos poseemos emociones, cada uno tiene derecho a su propia certeza emocional en el pensamiento... es absurdo intentar imponer esa certeza a los otros. (111)
De Bono(1992). Entre paréntesis el nº de pagina de la edición española; los puntos suspensivos indican partes del texto omitidas.
III. Personajes.
Carroll, Lewis (1832-1898).
Nombre literario del reverendo Charles Lutwidge Dodgson, profesor de matemáticas en Oxford, que cursó la carrera eclesiástica, llegando sólo hasta el grado de diácono. Encariñado con los niños, escribió para ellos los libros sobre «Alicia», que dedicó en principio a las hijas del doctor Liddel, deán de la Christ Church. Publicó también tratados matemáticos, pero no es mundialmente conocido por ellos, sino por sus obras de ficción. Destacan Alicia en el país de las maravillas (1865) y A través del espejo (1871), que tanto interés suscitan entre los lógicos.
Diccionario de filosofía. Jordi Cortés Morató y Antoni Martínez Riu.
IV. Notas.
Feynman(1999) Richard P. Feynman "El placer de descubrir" Editorial Crítica. Colección Drakontos Barcelona, 2000 pp 217 Nota: El libro está formado por varios escritos y conferencias. La fecha se refiere a la aparición de la versión inglesa. R.P.F. vivió 1918-1988.
Bono(1992) Edward De Bono. "El pensamiento práctico". Paidos. 1992. [Nota: la editorial omite el año de edición del texto de De Bono, aunque si aclara que lo hizo Jonathan Cape, Ltd., Londres. Por lo tanto utilizo la fecha de la edición española]
Carlos Salinas
17-nov-2000
Barcelona. España.
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